Flexibilidad y creatividad en educación.
La sociedad actual requiere personas emprendedoras, creativas, con gran capacidad de adaptación y una capacidad inmensa de aprendizaje durante toda la vida.
Los alumnos ya no están dispuestos a aprender pasivamente sino que quieren ser parte activa del proceso, ser creadores de contenidos.
Preguntar es más complicado de lo que parece, nos acostumbramos a dejar de preguntar a medida que nos hacemos mayores, y perdemos esa curiosidad innata de un niño de dos o tres años que no para de decir porque?, porque?, y porque? …
Al introducir conocimientos a los más pequeños, sin dejar que estos conocimientos sean percibidos por ellos mismos como consecuencia de sus razonamientos, lo que estamos logrando es acallar la flexibilidad y la creatividada con la que todos nacemos.
Lo más importante es motivar a los niños a aprender con gusto y permitirles satisfacer la curiosidad y experimentar el placer de descubrir el mundo a través de su propia mirada.
«Los alumnos de infantil son los que hacen las mejores preguntas. Porque todavía no los ha cambiado el sistema educativo y tienen una creatividad a prueba de bombas.»
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